Arquitectura

Casas con líneas sencillas y minimalista son un requisito de nuestras casas. Volúmenes grandes con grandes vidrieras para crear espacios muy luminosos. Cada parcela tiene sus particularidades como la orientación, topografía, etc. y hay que adaptar la casa al entorno. Por último y no menos importante las necesidades de nuestro cliente, nuestro fundamento para comenzar el diseño. Los materiales de hoy dan la posibilidad de un diseño con gran naturalidad.

Seguimos criterios para una máxima eficiencia, favoreciendo el uso racional de la energía, cuidando al mismo tiempo del medio ambiente, la calidad y el confort climático interior. Por ello, el proceso de diseño arquitectónico debe incorporar parámetros de diseño que reduzcan la demanda energética del edificio y mejoren el confort en los espacios interiores. Esto, a nuestro entender, no lo tenemos que conseguir con maquinaria sofisticada, sino con el diseño pasivo de la misma construcción adaptada al clima donde se sitúa. No requieren productos ni materiales distintos de los de la construcción tradicional, simplemente se trata de la optimización de los recursos existentes a través de técnicas pasivas, como pueden ser una orientación correcta de las ventanas para maximizar las ganancias solares en el periodo de invierno y unas protecciones solares para evitar el calentamiento en verano.

  • Lineas minimalistas

  • Confort climático interior

  • Grandes cristaleras

  • Máxima eficiencia

  • Espacios luminosos

  • Adaptación al entorno